El país de Madiba

Y llegó el día....

Aunque parecía que nunca lo haría. Hacía 8 meses que habíamos comprado los billetes a Johannesburgo, haciéndonos eco de una intuición de las mías y de una atractiva oferta de la Turkish Airlines. Y sí, por fin llegó, y con él la luz, el color y la explosión de vida.

SUDÁFRICA no deja indiferente a nadie, sobre todo por sus polarizados contrastes: blanco/negro, húmedo/seco, frio/calor... El que pintó ese país, necesitó llenar una paleta con una amplia gama de verdes, azules y sienas tostados.

Visitamos dos regiones: Mpumalanga, hogar del Blyde River Canyon y del Kruger, y Western Cape, sede oficial del Gran Blanco y de la Southern Right Whale (ballena austral). 18 días de no parar para atisbar solo una pequeña parte de este vasto país.

Alguien me había dicho que como yo ya había visto los animales en el Serengeti, aquí no me llamarían tanto la atención. Lejos de esto, mi estancia de 4 días en el Kruger solo me incitó a querer  volver, si pudiera, durante 3 meses al menos.

Tiene su punto poder circular en tu coche de alquiler a tu aire por todo el parque, y apostarte en las lagunas hasta que el primer acto de esta gran escenografía comienza. Los parques nacionales de toda Sudáfrica están muy bien gestionados, sobre todo por lograr una adecuada simbiosis entre la divulgación del patrimonio natural, el disfrute del mismo y su conservación. Todo muy bien señalizado y, en la mayoría de los parques, con senderos elevados de madera para interferir mínimamente en el medio. Lo mejor es comprar una Wild Card (90€) que te permite visitar casi todos los parques nacionales de Sudáfrica durante 1 año, y son más de 20.

El cañón del río Blyde es un cauce de 600 a 800 metros de profundidad que el río excavó durante millones de años en la roca granítica. Es uno de los cañones más grandes de África, y en su entorno hay una docena de cascadas a cual más escénica y un mirador sobre la llanura (The God's Window), que hace comprender los caprichos de la orogenia de nuestra corteza terrestre, lugar éste de una excepcional belleza pues no en vano se le llama la "Ventana de Dios".

Tras disfrutar de la más genuina experiencia africana, nos fuimos a la costa suroeste donde abundan acantilados, cabos y bahías con unos paisajes que más suenan al oeste de Canadá, pero con el aliciente de la luz del continente de la gran colonización. Y hablando de colonización, es duro constatar como un país tan rico está en manos blancas, manos que dejan las migajas a la mayoría negra. Este es el reverso de la moneda: la opinión pública blanca ignora casi por completo los problemas de la pobreza y el Sida, pero se moviliza masivamente por cualquier bebé foca varado en una playa. Otro contraste: mansiones electrificadas/barracas de chapa. Una vez abolido el Apartheid, superar la grave segregación económica necesitará todavía mucho tiempo, pero aquí la historia se escribe día a día. Ya veremos que ocurre tras la muerte de Mandela.

Hecho este inciso, regresemos a nuestra ruta de verdes colina, a nuestros acantilados y salvajes mareas en las que van y vienes juguetones lobos marinos, pacíficas ballenas y temibles tiburones blancos. Al este está la Garden Route, zona de bosque denso con gigantescos árboles, resto de un magnífico bosque primario adornado de kilómetros de dunas y olas poderosas.

18 días de sorpresa tras sorpresa: un lance de caza de 13 leonas contra un búfalo, el parto de una ballena, los afilados dientes del Gran Blanco, los atardeceres naranjas, las noches de la Estrella del Sur....

En fin, ¡¡buenas noches África!! Soñaré con ver un nuevo amanecer en la tierra de los San, los Khoi y los Tswana.









Webgrafía  Básic@

Hoteles: http://www.booking.com

Alquiler de coches: http://www.alquilercochesargus.es

Excursiones: http://mandelitatravels.com
                      http://walkerbayadventures.co.za
                      http://whitesharkafrica.com

Parques Nacionales: http://www.sanpark.com

Trekkings: http://es.wikiloc.com/wikiloc/user.do?name=sextante&id=14145
(Gracias a Rafa por compartir su magnífico trabajo con todos nosotros)


Lo que no hay que perderse

 

Las noches estrelladas

 

El Leopard Trail y el Guinea Trail en el Cañón del Río Blyde.

 

La Ventana de los Dioses, los Potholes, Berlin Falls y Lisbon Falls en el mismo lugar.

 

Probar el "Diggers stew" en el restaurante The Wine en Pilgrim's Rest, antiguo asentamiento de los buscadores de oro. Muy bien conservado.

 

Alojarse en el logde "Sabie River Bush Lodge". Disfrutar de una cerveza viendo hipopótamos y elefantes.

 

Disfrutar del parque Kruger cuantos más días sea posible.

 

Probar la carne de Kudu en las barbacoas instaladas en las áreas de descanso del parque.

 

Hacer un safari nocturno y, si os atrevéis, uno a pié con los Rangers del parque.

 

Simon's Town, un encantador pueblo pesquero cercano al Cape Point y al Cabo de Buena Esperanza.

 

Los pingüinos de Boulder Beach.

 

Excursión para ver al Gran Blanco en acción. Se puede hacer desde Simon's Town, Mossel Bay o Gansbaai.

 

Probar el steak calamari en el restaurante Dixie.

 

Trekking del Cabo de Buena Esperanza.

 

Hermanus, un paseo por sus acantilados para ver ballenas y si no las ves, hacer una excursión en barco para avistarlas.

 

Knysna, probar sus afamadas ostras y las espetas de Hake en el restaurante 34º South en el puerto.

 

El trekking por Roberg Nature Reserve en Plettenberg, muy escénico y salvaje.

 

Parque nacional de Tsitsikamma y sus dos recorridos más famosos: Suspensión Brigde y Waterfall Trail (ojito con el horario de mareas).

 

Ciudad del Cabo, visitar el museo del Six Distric, Table Mountain, Puerto y por supuesto, cenar en Pigalle (exquisita cocina).